El camino vertical se articula en dos tramos:

El primer tramo, de menor dificultad (K3), presenta algunos tramos aéreos, ligeramente desplomados, equipados con cadenas y escalones, y con dos puentes. Este primer tramo llega hasta una plataforma natural donde se encuentra el camino de regreso. Para salir, hay que seguir este camino hacia la izquierda mirando la pared, en dirección a Fígols, que acaba bajando por una cantera hasta el inicio del camino vertical en unos 15 minutos. Este tramo puede recorrerse en 1 hora aproximadamente. Tiene una longitud de 278 metros y un desnivel de 80 metros.

Se accede al segundo tramo a través del camino que encontramos al final del tramo anterior, hacia la derecha. Este tramo, más difícil que el anterior (K4), alterna secciones verticales, travesías laterales y pasos por bancales con vegetación, todo perfectamente equipado con escalones, escaleras y un puente tibetano que nos llevan hacia la parte superior de la roca de Narieda , desde donde disfrutaremos de una vista espléndida de todo el valle. El recorrido de este segundo tramo a partir del tramo anterior es de 841 metros, con un desnivel de 375 metros. El regreso se realiza por un sendero marcado que, después de una bajada de más de 500 metros, nos deja en el aparcamiento. El tiempo aproximado de regreso al aparcamiento es de 1 hora. El tiempo aproximado para realizar toda la actividad, incluyendo el acceso, el camino vertical y el regreso hasta el aparcamiento, es de 5 horas como mínimo.

Con sus 455 metros de desnivel, los dos tramos consecutivos de camino vertical hacen de la roca de Narieda el camino vertical con mayor desnivel de España y el tercero en longitud, con 1.119 metros.